Toda una vida buscando justicia:
falleció Margarita Patiño viuda de Hugo Bustíos
Margarita Patiño Rey Sánchez nació en Huancayo, en 1952. Estudió Enfermería en la Universidad Nacional de San Cristóbal de Huamanga. Se casó con el periodista Hugo Bustíos Saavedra, con quien tuvo 4 hijos: Sharmelí, Patricia, Celia y Hugo.
Margarita Patiño enfrentó situaciones adversas como la detención-desaparición de su esposo en Huanta, a manos de efectivos de la Marina, en 1984. Mientras Hugo Bustíos era sometido a terribles torturas en el Estadio de Huanta, Margarita no escatimó esfuerzos para lograr su liberación; incluso viajó a Huamanga y Lima para entrevistarse con autoridades civiles y militares. Su esposo fue finalmente liberado con vida, aunque en pésimo estado de salud.
Tras esta experiencia límite, y pese a las amenazas y riesgos que implicaba ejercer el periodismo en la década de los 80, la época más violenta que vivió Ayacucho, Hugo Bustíos dedicó el resto de su vida al periodismo de investigación y denuncia, hasta su asesinato a manos de una patrulla del Ejército, en 1988.
Luego de este trágico suceso, Margarita Patiño dedicó su vida a la incansable búsqueda de verdad y justicia. Su forma de vida cambió radicalmente, pues tuvo que alternar sus labores de ama de casa, empresaria y madre con un rol activo como defensora de los derechos humanos. En abril de 2002, en su testimonio ante la CVR, supo resumir de manera muy sentida los reclamos de los familiares de las víctimas del conflicto armado:
"…ya que nos han dado esta oportunidad de hacer una sola voz en los reclamos, por favor, que se haga justicia, es lo que más quiero; nos merecemos por lo menos una disculpa pública, y que digan: fuimos nosotros, nos equivocamos".
La búsqueda de justicia de Margarita Patiño por el asesinato de su esposo ha sido tenaz y contínua; transcurrió por diversas instancias: un tribunal militar, la CIDH -que ordenó medidas de protección ante las múltiples amenazas- y la Sala Penal Nacional, donde actualmente continúa. En todas las circunstancias de este largo proceso, Margarita mostró tenacidad y coraje singulares en la búsqueda de verdad y justicia.
Desde el año 2015 la salud de Margarita Patiño comenzó a verse afectada por los largos años de lucha. El agotamiento hizo mella en sus fuerzas, por lo que viajó a Huanta para descansar, aunque ella tenía previsto volver a Lima en noviembre, para participar en la última etapa del juicio oral contra Daniel Urresti. Fue entonces cuando le sorprendió la muerte, tras sufrir un accidente de tránsito el 27 de octubre de este año.
Margarita Patiño deja con su partida un vacío que será difícil reemplazar, puesto que era una de las voces más firmes entre los familiares de víctimas del conflicto armado interno. La mejor forma de honrar su memoria es convertir el dolor en fuerza, para coronar su lucha con una victoria. Como ella misma dijera en agosto del año 2014, en su discurso en el Ojo que Llora:
"…Les insto a seguir adelante más allá de nuestro dolor, del agotamiento que toda lucha trae consigo y la impotencia ante la injusticia y poca vergüenza de quienes ejercen el poder. Que la verdad triunfe, y que los criminales sean condenados. No hay peor lucha que la que se abandona".
Lima, 28 de octubre de 2016